martes, 25 de enero de 2022

They Shall Not Grow Old (2018) de Peter Jackson

El año pasado tuve la oportunidad de ver este espectacular documental sobre la Primera Guerra Mundial hecho en su totalidad por el realizador Peter Jackson; la película fue co-encargada por el consorcio 14-18 NOW: un programa artístico elaborado por el Reino Unido para conmemorar el primer centenario de la Guerra Mundial, el Museo Imperial de la Guerra (Imperial War Museum o IWM por sus siglas en inglés) y en asociación con la cadena BBC, quiénes sus representantes se acercaron a Jackson en el año 2015 para proponerle el proyecto. Para él constituyó un proyecto personal ya que uno de sus abuelos, el Sargento William Jackson fue parte del Ejército Británico desde 1910 a 1919 y participó en la Gran Guerra.
El título de este documental se inspiró en la oración "They shall grow not old" del poema de 1914 "Por los caídos" del poeta inglés Laurence Binyon, que era famoso por ser usado en la Oda de Rememoración: un día de recuerdo del conflicto bélico para el Reino Unido y los países de la Commonwealth; lo que hizo Peter Jackson fue elegir poner las palabras en un orden más lógico, en contraste con la sintaxis más arcaica que tenía Binyon.
El director tuvo total acceso a 600 horas de entrevistas realizadas por la emisora BBC y el IWM, además de 100 horas de filmaciones originales en blanco y negro del IWM; la mayoría de esas imágenes registradas nunca fueron vistas antes, y con una antigüedad de más de 100 años para el momento de su estreno.
Jackson reunió a su equipo de trabajo, de su propia productora WingNut Films y revisaron todo el material disponible, por ejemplo de las entrevistas a los 200 soldados se utilizaron el audio de 120 de ellos en la película; solo para esta tarea de compilar, ordenar y procesar las filmaciones se demandó un año entero de revisión. En una entrevista para el portal australiano Flicks, Jackson declaró: "Tomamos la decisión de no identificar a los soldados como sucedió en la película. Había tantos nombres que aparecerían en la pantalla cada vez que aparecía una voz. En cierto modo se convirtió en una película anónima y agnóstica. También editamos cualquier referencia a fechas y lugares, porque no quería que la película fuera sobre este día aquí o ese día allí. Hay cientos de libros sobre todo eso. Quería que la película fuera una experiencia humana y fuera agnóstica de esa manera… No quería historias individuales sobre individuos, quería que fuera lo que terminó siendo: 120 hombres contando una sola historia que es ¿cómo fue ser un soldado británico en el frente occidental?”
La mayoría de las imágenes han sido coloreadas y transformadas con modernas e innovadoras técnicas de producción por computadora, se añadieron efectos de sonido y voces para que se aprecie todo el conflicto de primera mano y uno mismo al ver las imágenes pueda sentirse más cerca de las experiencias reales vividas por los soldados. Las voces de los soldados en las imágenes restauradas se añadieron leyendo de manera profesional sus labios, y luego (en aras de la exactitud) contratando actores de voz de la misma zona de Gran Bretaña donde los soldados provenían. Bajo ningún punto de vista Jackson quería utilizar una voz como narrador como los documentales tradicionales.
Uno de los grandes desafíos para colorear de las imágenes fueron la hierba y la suciedad, algunos de los lugares reales fueron identificados y el mismo Peter Jackson se encargó de ir personalmente y tomó miles de fotos para usar como referencia al momento de la restauración. Hay que decir que no todas las escenas de lucha vistas en las filmaciones fueron tomadas en el momento preciso de la batalla; durante la Primera Guerra Mundial los periodistas y camarógrafos de los noticieros para cine tenían acceso al campo con los soldados cuando las situaciones estaban más tranquilas y controladas, por lo que algunas escenas de batalla fueron recreadas deliberadamente para la cámara, con sólo un día o dos de diferencia después de la batalla real, por los soldados para permitir a los camarógrafos mostrar algunas cosas con mayor claridad de lo que habrían sido capaces de obtener. Este material recreado original de los archivos del noticiero fue muy utilizado por Jackson ya que son filmaciones más cinematográficas y la calidad de la fotografía es mucho mejor de lo que las genuinas imágenes durante el campo de batalla les habría permitido.
Otro de los elementos claves de este documental es el hecho que el realizador dejó de lado de manera deliberada como era la perspectiva de la guerra vista por los franceses, canadienses, estadounidenses, alemanes, rusos y otros participantes debido a la enormidad de tiempo de lo que podría haber hecho; es por esto que optó por centrarse solo en las fuerzas británicas sintiendo que su experiencia era similar a la de todos los demás, comentando que los soldados de cualquier país podrían haber sido sustituidos y la película habría sido la misma.
Cuando se estaba acercando el final de la producción, Peter Jackson tuvo como idea de que la película termine con la canción "Mademoiselle from Armentières" (que fue particularmente popular durante la guerra) en los créditos finales y producir una nueva grabación. Si bien no hubo tiempo de que actores británicos volaran hasta Nueva Zelanda, y en lugar de que hombres no británicos trataran de cantar con acento británico, hablantes nativos al servicio del gobierno del Reino Unido fueron reclutados por la Alta Comisión británica en el país (British High Commission Wellington) para que vinieran al estudio de grabación a interpretar una versión extendida de la canción.
They Shall Not Grow Old fue producida enteramente por Peter Jackson junto a Clare Olssen, con Ken Kamins, Tessa Ross y Jenny Waldman como productores ejecutivos; el score musical fue compuesto por el trío neozelandés Plan 9 formado por David Donaldson, Steve Roche y Janet Roddick. Por último Jabez Olssen fue el encargado de editar todo el documental. La coproducción entre Reino Unido y Nueva Zelanda fue realizada, además de WingNut Films, por House Productions, el Imperial War Museum de Londres y el canal BBC One con sus derechos televisivos. Trafalgar Releasing se hizo de los derechos de exhibición en los cines británicos y Warner Bros. Pictures obtuvo los derechos para la mayoría de los países del mundo. 
La película tuvo una premiere especial el día 16 de octubre de 2018 en el BFI Festival de Cine de Londres en presencia del príncipe William, Duque de Cambridge, y el 22 de octubre se presentó en el Festival de Cine de Roma, Italia. Finalmente se estrenó de manera comercial a partir del 9 de noviembre del 2018 en varios cines seleccionados del Reino Unido, mientras que se enviaron copias de la película también a escuelas del país para que la exhiban el mismo día. Tras estrenarse en varios países como Irlanda, Australia, Nueva Zelanda, Rusia, Sudáfrica, Canadá, Estados Unidos, Suecia y Perú, They Shall Not Grow Old fue estrenada en Argentina como una selección dentro del Festival de Cine de Buenos Aires - BAFICI el día lunes 8 de abril del 2019 con el título “Jamás llegarán a viejos”, para luego tener un lanzamiento en los cines comerciales a partir del jueves 18 del mismo mes. La crítica especializada alabó todo el enorme trabajo y el esfuerzo realizado por Jackson para mantener la tensión y el interés durante todo el documental, especialmente en su representación de la guerra; They Shall Not Grow Old obtuvo una nominación para el Premio BAFTA al Mejor Documental.
Como dato interesante hay que mencionar que Peter Jackson no recibió ningún pago por la realización de este documental, los montos que le entregaron a su productora le sirvieron al equipo para costear los trabajos de restauración visual de todas las 100 horas de metraje que el Museo Imperial de la Guerra les enviaron de forma gratuita, con el firme propósito únicamente para poner su archivo fílmico en mejores condiciones y no se deteriore más el nitrato.

Apreciaciones generales

Debo decirles que me encanta la historia en general, tanto leerla como verla, y nunca había visto tantas filmaciones inéditas sobre la Primera Guerra Mundial y como era la sociedad británica en ese momento, el antes y el después donde la sociedad tomó una postura cuando el conflicto bélico finalizó y había que volver a la normalidad. Lo que más me impactó de “Jamás llegarán a viejos” son las variadas imágenes crudas y terribles de la guerra, las deplorables e inhumanas condiciones de vida en que los miles de cuerpos de batallones ingleses tenían que (con)vivir en las trincheras, al igual que en el campo enemigo. Las imágenes mezcladas con el relato en primera persona de los soldados o militares de alto rango muestra la terrible realidad de lo que fue ser parte de una guerra que tomó mucho tiempo, aunque también cómo eran los escasos momentos de esparcimiento y diversión que se buscaban para tratar de pasar la situación de la mejor manera posible, todo tratado con un grado de rigurosidad y respeto por parte del realizador y su equipo.
La sensación de que somos parte del conflicto, estando ahí como si fuéramos un soldado más es el excelente enfoque particular que le da Jackson al tratamiento narrativo, para contar su visión del conflicto generado entre ingleses y alemanes antes, durante y después de que finalizó la llamada Gran Guerra durante mucho tiempo.
Personalmente les recomiendo mucho este documental, tremendo laburo de un grande como es Peter Jackson, al que me gusta más en su faceta como director de cine de terror (aclaro), pero They Shall Not Grow Old me atrapó desde su primer momento por el lado de la historia, uno de mis grandes intereses. Y aún para el que no es muy interesado a este tipo de género, hago la recomendación solo a los fines de que las imágenes sean lo suficientemente sugestivas para tomar conciencia de los horrores de la guerra y sus consecuencias.
Si están interesados en verla la pueden encontrar en algunas páginas de internet para ver de manera online, en mi caso la vi subtitulada y creo que es la mejor forma para ver este documental. Desconozco si se encuentra disponible en algunas de las plataformas de streaming disponibles.

Algunas imágenes del documental:


Federico